martes, 9 de agosto de 2011

Preparando el gran salto (castellano)

 Ya tenía un objetivo en su vida por el que luchar. Hasta entonces el único sueño que perseguir había sido la universidad. Oh, sí. Ésa había sido su única meta concreta: alcanzar la carrera que quería estudiar, pero lo que vendría después siempre había sido un interrogante, algo en lo que evitaba pensar para no darse cuenta que sus sueños no eran muy ambiciosos y que no sabía qué esperar de la vida.
 Después del colegio la universidad, ¿y luego qué habría? Nada pensado, nada deseado especialmente... hasta ese momento. Ahora ya tenía un nuevo objetivo, sabía cual sería el siguiente paso: un gran salto. Pero debía ser precavida, era arriesgado, aunque no tenía miedo, sólo emoción y ganas de que los años pasasen en un suspiro.
 Todavía no sabía qué quería de la vida más allá de estos pocos años próximos, pero al menos ya sabía donde encontraría la respuesta. Oh, claro que lo sabía.
 No es consciente que su mundo y sus sueños han dado la vuelta con sólo tomar la decisión de querer saltar y abrir una nueva puerta. Sólo se da cuenta de que algo importante ha cambiado, pero aun no sabe qué es y siente que ya no puede pararlo.
 Pero no... espera... te estás avanzando demasiado, joven aventurera, hay que ir a poco a poco y con pies de plomo. No, no te apresures tanto, tienes todo el tiempo del mundo. Ahora tienes cosas más importantes que hacer si realmente quieres saltar.
 De momento, sólo prepárate y asegúrate que los pasos anteriores al salto son firmes y dejan huella, es lo más importante por ahora; el resto ya vendrá, no tengas tanta prisa.
 Antes era la universidad, ahora tienes otro sueño mucho más ambicioso, pero no por él te olvides de tu objetivo principal del momento. Habrás de subir muchos peldaños, nada fáciles, para poder saltar sin hacerte daño. No puedes saltarte todo lo que viene antes porque también es muy importante y bello, no necesitas ir tan deprisa... tu oportunidad llegará, sólo has de ser paciente y cumplir con todo aquello que se espera de ti ahora.
 No olvides el resto de tus sueños por uno solo, por muy grande y brillante que sea. Ya has invertido demasiado en los demás como para dejarlos aparcados así. Además, algunos de ellos serán tu billete de ida... sabes bien que el de vuelta no está asegurado. Si saltas al vacío en plena oscuridad no sabes lo que te encontrarás abajo: tal vez más vacío... o un lugar lleno de luz y recubierto de cojines para que la caída no sea más que una mera transición suave, comparada con todo lo que te espera en el sitio al que has llegado, tan lleno de luz...

No hay comentarios:

Publicar un comentario